El
País, España - Sábado 9 de septiembre de 2017
Los
argentinos que huyen de la inflación y para ello cruzan la frontera
hacia Chile. Allí consiguen rebajas de hasta el 50%, sobre todo en
productos electrónicos. El éxodo crece durante el verano, cuando
los pasos de la cordillera suelen colapsar y las colas alcanzan
kilómetros. La búsqueda
de precios bajos es tan frenética que hasta los ministros de
Mauricio Macri aprovechan los precios chilenos. Al menos el rabino
Sergio Bergman, a cargo de Ambiente y Desarrollo Sustentable.
Una periodista fotografió a Bergman en la aduana con un enormes
televisor y subió la foto a Twitter, donde rápidamente se viralizó.
Bergman
suele convertirse en estrella de las redes sociales. Hace dos semanas
se disfrazó de planta para llamar la atención sobre el cambio
climático. Y una de sus primeras declaraciones como ministro de
Ambiente fue un llamado a
rezar para que la temporada de incendios, que su cartera debe
controlar, no fuese demasiado devastadora.
Ahora, su foto con un televisor imposible de disimular lo puso una
vez más en el centro de una polémica. "Volviendo
de SCL [Santiago de Chile] me encuentro a @sergiobergman en el avión.
¿Le parecerán caros en arg los tv? Se trajo 2 de Chile!!!”,
escribió Arantxa Escribano, la periodista que lo descubrió.
Bergman
no se encontraba de vacaciones en Chile, sino en un viaje oficial. Él
mismo se ocupó de adelantar en Twitter su
participación en el II Congreso Interamericano sobre el Estado de
Derecho Ambiental, organizado por la OEA. "Se realizó de cara a
los desafíos en la implementación del objetivo 16 de la #Agenda2030
del Desarrollo Sostenible de la #ONU”,
escribió el ministro. El cruce de la cordillera también animó a
Bergman a salir de compras.
Desde
el entorno del ministro confirmaron la compra del televisor.
Aclararon que no fueron dos sino sólo uno, "lo pagó de su
bolsillo", lo declaró en la aduana y lo donará a la Fundación
Centro de Espiritualidad Judía Mishkánen, que hoy jueves celebra 25
años. La versión oficial
es que la Fundación no confirmó el evento hasta último momento y
cuando llegó la invitación Bergman ya se encontraba en Chile. "Cómo
se había comprometido a hacer la donación tuvo que comprarlo en
Santiago",
dijo a EL PAÍS el director de prensa y comunicación del ministerio,
Juan Caruso... El televisor terminará entonces en la Fundación, y a
precio de ganga.
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